El ERP, más de 30 años de evolución

Actualidad julio 2, 2015
Desde sus inicios, ha pasado por diferentes fases en las que ha conseguido potenciar la productividad y competitividad de las compañías.

Grupo i68 resalta la importancia de las últimas aplicaciones conseguidas en el ERP a través de soluciones que lo flexibilizan y lo convierten en una herramienta más accesible.

Los sistemas de gestión surgen como respuesta a las necesidades de conocimiento del mercado y también de la actividad de la propia empresa, así como del control de sus activos y proyectos. Gracias a los ERP las compañías centralizan y automatizan los procesos de negocio y los flujos de trabajo, facilitando la disponibilidad de la información en la organización y simplificando el control sobre estas tareas.

Los inicios del ERP
El ERP ha tenido una evolución muy significativa, ya que sus inicios provienen de la Segunda Guerra Mundial, en la que se desarrollaron las aplicaciones MRP (Material Requirements Planning Systems) como un desarrollo militar que permitía disponer de un inventario simplificado, en el que se controlaban las órdenes de pedido, la producción y el stock de los recursos bélicos. Posteriormente las principales empresas norteamericanas comenzaron a utilizarlos y a favorecer su evolución, incluyendo la planificación de los recursos de producción durante la década de los 60 y 70.

Durante los años 80 se tiene constancia de la primera referencia del ERP actual. Debido a la alta competencia que surgía entre las compañías, las anteriores aplicaciones avanzaron para hacer frente a la situación del mercado y ampliaron sus capacidades, ofreciendo la posibilidad de gestionar todos los recursos de una empresa. Aprovechando el crecimiento de las compañías, los sistemas ERP van evolucionando permitiéndoles gestionar de forma integrada los negocios e incluir, además de la fabricación, áreas como la distribución, ventas, recursos humanos, facturación, contabilidad y relación con los clientes.

ERP de última generación
En los últimos años el ERP ha tenido que adaptarse a los cambios acontecidos en los escenarios económicos, sociales y tecnológicos convirtiéndose en el ERP que conocemos actualmente; un sistema de gestión que integra y centraliza los datos de una empresa y automatiza los procesos de negocio y flujos de trabajo. Además de interconectar las operaciones de la empresa de diferentes departamentos, áreas de negocio e incluso delegaciones, facilitando el acceso a la información en toda la organización y simplificando los procesos y su control.

El ERP se ha ido flexibilizando según han ido apareciendo nuevas necesidades empresariales, permitiendo a las empresas ser más ágiles, fáciles de entender y cumplir sus objetivos gracias a la integración de las últimas herramientas sociales, han logrado importantes avances como la integración en la nube, la movilidad para que se pueda trabajar desde cualquier dispositivo y lugar, y la sociabilidad de forma que todos los trabajadores pueden disponer de la información actualizada, en tiempo real y con la posibilidad de que diferentes personas puedan realizar cambios en un mismo documento. Gracias a estas características el ERP se ha convertido en un elemento básico y necesario para que las compañías mejoren su competitividad y productividad.

Fuente: www.ticpymes.es

Últimos post

Leer más
Leer más
Leer más